Prolapso Uterino
El prolapso de útero es una evaginación de este órgano, hacia el exterior. No es mortal en primera instancia, pero sí puede llegar a producir grandes daños en sus tejidos si no se trata a tiempo y, generar problemas de irrigación e infección aguda en otros casos más severos y avanzados.
El prolapso de útero se puede llegar a presentar en algunos casos después del parto, una vez que hayan nacido todos los fetos. Se puede presentar en todas las edades, pero
con más frecuencia en hembras debilitadas y viejas, aunque también puede ocurrir en hembras primerizas.
Hay distintas causas que pueden llevar a un prolapso uterino siendo la más frecuente, una distocia durante el parto (parto lento, laborioso y difícil). Se puede iniciar durante la expulsión o inmediatamente después del nacimiento del feto.
En la mayoría de los casos, la coneja se encuentra en decúbito y el órgano prolapsado está en contacto con el suelo. Muchas veces se observa como una estructura roja, edematizada y sangrante que sale desde la zona vulvar.
Cuando el prolapso tiene algunas horas de haber ocurrido, lo expuesto se torna más oscuro y friable. Con frecuencia el útero se lacera con rapidez y la hemorragia puede estar presente.
Puede haber un compromiso mayor del estado general de la coneja si el prolapso es muy severo, ya que, es un cuadro que también genera mucho dolor y si hay hemorragia presente, el cuadro se puede tornar más grave si no hay atención médica lo antes posible, comprometiendo además la vida de la coneja.
Pronóstico
El pronóstico depende del periodo de existencia del prolapso, el grado del trauma del órgano, la extensión y la contaminación de las porciones prolapsadas. Todo esto produce dificultad para lograr la corrección del órgano revertido y prolapsado.
Las posibilidades de laceraciones aumentan cuando el edema se incrementa, pudiendo causar pérdida severa de sangre.
Si se presenta infección o necrosis, se puede desarrollar con rapidez sepsis, en especial cuando el órgano se regresa a la cavidad abdominal. En casos cuando el órgano está muy afectado, se recomienda la histerectomia.
En ocasiones, cuando se realizan acciones médicas tempranas, el órgano puede regenerarse y la coneja se recupera sin mayores complicaciones, gracias a la intervención rápida y a un buen tratamiento con medicamentos.
Este es el caso de Satanás, una conejita que sufrió de prolapso uterino sin causa aparente:
"La doctora me dijo que lo más probable haya sido que estaba entrando en celo y al pujar fuerte para orinar o defecar, su útero se desprendió́. La noche anterior a que esto ocurriera ella estaba súper bien y no se le veía decaída. Luego en la mañana ella no quería salir de la jaula y vi que algo rojo tenía.
La llevamos al vet y se veía mal. Llegando la hospitalizaron inmediatamente y me dijeron que debían operarla en una horas por lo que debíamos irnos. En la tarde hable con la doctora y me comentó que estaba todo bien y que había salido bien de la operación. Estuvo unos días hospitalizada, e iba progresando bastante bien.
La cicatriz nunca se la tocaba o mordía, así que eso fue bueno, y los remedios los recibía súper bien.