Normalmente, los conejos son una especie que les encanta acicalarse, no obstante, los discapacitados tienen dificultad para hacerlo y debemos ayudarlos.

Acicalarlo puede ser una gran oportunidad para regalonear con él y fortalecer lazos. A menudo se logra un vínculo muy importante gracias a esto.

Eliminar el exceso de pelo en conejos de pelo corto puede ser menos complicado y bastaría con usar un guante-cepillo, pero en aquellos más lanudos la tarea es más difícil.

En el caso de los conejitos con movilidad limitada es lógico que sea más propenso a tener un sistema digestivo más lento ya que éste necesita del movimiento de las patas traseras para funcionar adecuadamente. Al acicalarse suelen ingerir ciertas cantidades de pelo y una acumulación de esta naturaleza (tricobezoar) dentro de su tracto digestivo puede ser incluso más peligrosa que en un individuo sano. Por esto se hace fundamental eliminar los excesos.

Los cepillos con dientes de metal NO son una buena opción. Si tiramos, aunque sea muy suave el pelo con estos peines, les duele muchísimo. La piel de los conejos es muy sensible y delgada por lo que estos peines además podrían irritar o arañar su delicada dermis.

Definitivamente, para un conejo discapacitado lo mejor es usar un cepillo de bebé. Pueden ser adquiridos a precios asequibles en tiendas especializadas en cuidado infantil o farmacias. Busca uno con pequeñas cerdas que recogerán mejor sus pelitos.

Revisado por la Dra. Natalia Villalobos.